viernes, 15 de enero de 2010

Cuando ella lo desee...

Ella tiene la manía de buscar la perfección para alcanzar la felicidad. Pero ignora que la felicidad perfecta sólo existe cuando ella lo desea.
Ella es punto. Y coma, y tílde. Y puntos suspensivos…
Ella se encuentra al final de cualquier cosa. Incluso al final de esta frase. Y de ésta.
A ella le vuelven loca los paseos; no hace más que rondar por mi cabeza.
Ella no ama a cobro revertido; se gasta todo su saldo para querer con más ganas.
No besa; teletransporta.
No camina; mueve el mundo con sus pies.
No mira; desnuda con sus pupilas.
Sacrificaría todas sus lágrimas en mis ojos para que ella jamás llorara.
Ella es capaz de desafiar todas las leyes electromagnéticas. Nada tiene una capacidad de atracción tan fuerte como sus labios.
Puede controlar el tiempo a su antojo; cada vez que estoy con ella, el planeta entero se detiene.
Y mi adrenalina, se dispara.
Y mis latidos, se desbocan.
Ella es la causante del cambio climático; sus besos son tan ardientes que hierven las venas.
Aunque su olfato no sea el mejor de todos, ella sabe que tiene un olor tan dulce y suave que no necesita perfume; le viene de serie.
Tiene la piel clara y delicada, tierna y sedosa; la mejor envoltura que existe para un regalo.
Ella es capaz de resolver cualquier problema con sus palabras; lo único que me mantiene vivo y cálido es poder escucharla.
Su voz es tan peligrosa que tiene la capacidad de hipnotizar todo cuanto le rodea.
Ella es humilde; ni siquiera me pidió dedicarle estas letras. Para eso estoy yo.
Ahora, y cuando ella lo desee, su sonrisa iluminará el universo.

1 comentario:

Verónica Toribio dijo...

cada dia que pasa... te quiero mas.. :)